Dentro del estadio se evidenció un grupo de hinchas visitantes.
La decisión de cerrar fronteras para el partido entre Deportes Tolima y América de Cali quedó en el papel, ya que la determinación de no permitir el ingreso de hinchas visitantes se tomó desde la Alcaldía de Ibagué. Sin embargo, se observó que la Policía hizo caso omiso y permitió el acceso de algunos seguidores visitantes a la tribuna noroccidental.
Esta situación no es la primera vez que ocurre, pero sí pone en entredicho la autoridad, quienes expresan una cosa previamente, pero durante el desarrollo del evento, el público evidencia otra realidad.
Durante la jornada se registraron dos heridos, siendo uno de ellos un hincha del América de Cali, que sufrió algunas heridas con arma blanca a manos de una joven malintencionada que portaba la camiseta del Deportes Tolima.
Dentro del estadio, se evidenció la pasividad de la Policía, quienes no se desplegaron alrededor del campo de juego para realizar el anillo de seguridad hasta que la lluvia cesó; solo en ese momento se observó el ingreso de los uniformados.
Por otro lado, en las tribunas noroccidental y nororiental, hinchas del equipo visitante y del Deportes Tolima se enfrentaron lanzando bengalas de humo de un lado a otro, mientras la Policía permanecía inactiva, limitándose a observar la situación durante unos minutos.
A todo esto, se sumaron las deficiencias en las requisas de ingreso. Instantes después de la segunda anotación del equipo ‘pijao’, dos bengalas fueron encendidas y lanzadas al aire, una de las cuales cayó en la tribuna occidental. Surge la pregunta de ¿cómo ingresaron estos elementos a las gradas?